Contigo siempre

“Ayudar al que más lo necesita”, es el objetivo de la Fundación Cesáreo Berisso, que apoya al personal subalterno de la Fuerza Aerea Uruguaya.

Para el inicio de clases se entregaron más de un centenar de canastas escolares y otro tanto de canastas liceales. Las canastas son muy completas para el desempeño de los estudiantes que inician primaria y secundaria y fueron adquiridas con fondos de la fundación. Estos fondos provienen de la venta solidaria de ropa y otros artículos que son donados y se exponen ordenadamente en la pequeña sede ubicada en el predio de la Base Aérea número 1 de Carrasco, muy cerca del Museo Aeronáutico.

Para los recién nacidos se entrega un ajuar con manta, pañales, ropa de lana y ropa de algodón. Asimismo se entregan equipos deportivos en las cinco guarderías dispuestas en las unidades de la Fuerza Aérea.

Hay algunas situaciones extremas que requieren una intervención especial, rápida y directa. Un ejemplo reciente, fue la angustiante realidad de una familia de 5 integrantes que vivían utilizando un único colchón en su pequeña vivienda. La Fundación adquirió y proporcionó cuchetas y colchones para atender esa necesidad extrema, con fondos propios que no provienen de donaciones, para optimizar el tiempo de respuesta.

La pandemia ha distorsionado y afectado también a la Fundacion Berisso, impidiendo la realización de reuniones de recaudación de fondos y limitando la presencia de sus integrantes en el pequeño local.

Pero no decaen el entusiasmo ni los proyectos, entre los que se destaca el reinicio y ampliación de un programa de becas para continuar formando a los hijos del personal subalterno de la FAU en instituciones de enseñanza que ofrezcan becas. Asimismo se planifica incentivar actividades extracurriculares (música, manualidades, deportes) que ocupen a los chicos luego del horario de clases.

La solidaridad está plasmada en el compromiso de las 20 integrantes de la Fundación, lideradas por la Sra. María Calatayud, esposa del comandante en Jefe como es tradicional en la Fundación, que se complementan para atender las distintas tareas.

“Lo importante es la continuidad y el desarrollo de las tareas de apoyo”, dice su presidenta. Y agrega: “estamos aquí porque la gente necesita que la ayuden”.

El voluntariado y la dedicación distinguen a estas señoras, cuya actuación de bajo perfil y enorme trabajo cotidiano, quedan reflejados en una cálida y afectuosa frase, redactada en una tarjeta que acompaña a los ajuares.

Allí se plasma su profundo sentimiento: “contigo siempre”.